¿Castañas asadas?'

No voy a hablar del típico magosto o castañada, con sabor a gloria bendita, sino de algo que me hizo una infinita gracia. Durante mi estancia en un sanatorio local, una de las mujeres de la limpieza, al estar cerca de mí, me preguntó : ¿ Estuvo vd comiendo castañas asadas ?. Muy extrañada, le contesté :-No,¿por qué ?. Se sonrió y tomándome de las manos comentó:Es que tiene los dedos manchados de negro. ¡ Claro !, estuve leyendo periódicos y eso deja señal. Nos echamos a reír y esa fue la primera sonrisa que brotó de mis labios ese día sanatorial. Saludos, mis queridos lectores otiliaseijas@gmail.com